Como en un final de cuentos
sin bullicios ni tormentos,
cada día un comienzo
sin importar el tiempo,
ni la lluvia ni el viento
solo tú y yo en un momento,
trasportados por el tiempo
juntos en el firmamento.
No me atrevo ni a pensarte
se disparan mis sentidos,
el corazón, estrellado
confunde los latidos,
ah olvidado en el tiempo
el amor correspondido,
palpitando despacito
al compás de los amigos....